Tras publicar el mes pasado un post sobre adsumers, su continuidad adelantaba el contenido del siguiente en este mes de marzo. Antes de iniciar la Semana Santa, con sus merecidas vacaciones para todos, he encontrado el tiempo necesario para terminar de organizar algunas notas sobre las que he trabajado en en algunas jornadas. De hecho, ha sido la localización de un reciente caso de estudio, el que me ha inspirado las siguientes líneas:..
En el subtítulo, tomado del qué de pridecom (agencia especialista en Comunicación Interna 2.0 en España), planteo una declaración del principio que cualquier profesional de la gestión interna en una empresa ha de tener presente. Hoy por hoy, las empresas de tamaño medio pasan por fases críticas, que representan momentos claves en su desarrollo. Siguiendo esta línea, cabe considerar un complejo abanico que nos lleva “desde la expansión internacional, reorganizaciones, la diversificación de su oferta de productos y servicios, la mejora de la competitividad, la compra o fusión con otra empresa, la negociación de su financiación o entrada de nuevos accionistas, un cambio de estrategia”… a una restructuración para mejorar resultados o el natural cambio generacional en una empresa familiar. Quizás por ello, surgen los Consejeros Internos, incluso los asesores externos contratados puntualmente, que se enfrentan a estos desafíos teniendo en cuenta que aconsejan sin implementar. De aquí que pueda hablarse de “una filosofía de vida y una gran ventaja para las empresas en tiempo de crisis”. Por supuesto, sustentada en una trayectoria de éxitos probados, una decidida orientación a la obtención de resultados y la determinación en la consecución de los objetivos fijados… disfrutar de cada reto superado para divertirse, aún más, con el siguiente. El 3.0 empresarial está requiriendo de directivos que posean, y transmitan, este espíritu.
Los anteriores links recomendados sirven para centrar la cuestión y, de paso, para enlazar con la idea de empresas Anuncian3.0. Algunas de ellas, formando parte de la clásica AEA, empiezan a tener claro que deben intentar involucrar para innovar dentro y fuera del EDP. Para ello, las redes sociales aplicadas a ese hábitat que son las redes internas corporativas siguen unas etapas muy concretas. La mayor parte de ellas están recogidas en un libro blanco que recomiendo consultar y que ayudan a entender porque contratar a un especialista que bien podría ser un experto community manager. Un directivo interino o profesional senior que desde finales de 2012 es objeto de artículos y publicaciones en revistas especializadas. En la descripción del puesto que acabamos de apuntar, más allá de su perfil encontramos los cometidos que puntual y temporalmente puede desarrollar en una empresa: “se integra en el equipo directivo de la organización, realizando un diagnóstico de su situación actual, determinando los objetivos a alcanzar y ejecutando el plan acordado”.
La vinculación entre las redes internas corporativas y las RRSS adaptadas a su proyección externa está en: “Que un colaborador comprenda la contribución que hace a la empresa es fundamental para conseguir su compromiso en todos los retos que se le propongan”. Es decir, engagement en estado puro como materia prima para generar la situación ideal de gestión de talentos y capacidades. Poco más de un año después vuelvo a insistir en la interactuación, la integración (Plan de Comunicación 360 sobre Yammer) y la resiliencia empresarial que aparece como una alternativa más que resolutiva: “Alguna de las enseñanzas que nos deja la crisis es que para superar el bache, más allá de una buena estrategia, se necesita ante todo contar con directivos capaces, valientes y comprometidos. Las personas con talento son como nunca antes el factor clave de éxito de las empresas, y éstas acabarán compitiendo en términos de calidad directiva como ventaja competitiva diferenciadora en sus mercados”.
A modo de conclusión, sigue siendo preciso “el desarrollo de metodologías simples pero efectivas, que puedan ser utilizadas por las organizaciones para evaluar su capacidad de resiliencia así como de estrategias para mejorar dicha capacidad”. Además “también es necesaria la definición de métricas para evaluar la resiliencia que deben ser coherentes para quienes toman decisiones en las organizaciones, así como directamente relevantes con los objetivos generales de la organización. Dichas métricas normalmente analizan la resiliencia empresarial una vez que la disrupción ha acaecido, pero no evalúan la resiliencia empresarial previa a cualquier disrupción”.
¿Nada más disruptivo que internet y menos resiliente que las Redes Sociales en el interior de las organizaciones?
Toda una lectura recomendada para estos días, entre vacaciones y procesiones…
How technology is pushing humankind into a new stage of evolution, with as many massive implications for modern business ¿as for our individual lives?